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Con una nueva medalla de plata, en la madison gracias a la pareja formada por David Muntaner y Albert Torres, ha terminado el Campeonato del Mundo de pista que se ha celebrado en Minsk (Bielorrusia). La pareja española solamente fue superada por Francia (18 puntos a 15), con Alemania (13) cerrando el podio.
La pareja española llegaba a la capital bielorrusa tras una racha de infortunios. La fractura de clavícula de David Muntaner en Aguascalientes planteaba algunas dudas, sobre todo de cara a los relevos, ya que el estado de forma del mallorquín parecía bueno, ya que apenas había dejado de entrenar. Afortunadamente Albert Torres, atropellado en el ‘stage’ de Palma, ya estaba plenamente recuperado, como vimos el jueves en el scratch.
“No hemos entrenado ni una vez juntos en estas semanas. Pero físicamente estaba muy bien y lo mismo Albert. Y puedo asegurar que no me ha dolido nada la clavícula”, precisaba Muntaner. “Nos hemos visto un poco agarrotados en las primeras vueltas, por esa falta de entrenamiento. Pero ya son tres años que corremos juntos y antes de Aguascalientes habíamos entrenado bastante, por lo que una vez que nos hemos acoplado, no ha habido problemas”, corroboraba Torres.
Sin embargo, la pareja española permaneció muy agazapada en el comienzo, incluso pasándolo aparentemente mal en los primeros compases por ir tan retrasada. Prueba de ello es que no cogió ni un solo punto hasta que se produjo su ataque, lo que quizás pudo costarle el oro, ya que Francia si sumó 8 antes de ese momento, aunque la explicación de los dos corredores nos aclara la duda.
“Nuestra táctica estaba clara, no movernos hasta mitad de carrera y a partir del quinto o sexto sprint lanzar el ataque, bien en solitario, bien con alguna selección”, reconocía Torres. “A toro pasado podemos pensar en esos puntos que nos han faltado, pero a lo mejor habríamos lanzado un ataque, se habría ido otra selección y el resultado de la carrera hubiera sido otro”, añadía Muntaner.
Ucrania dominó esos primeros compases con un ataque tempranero junto a Kazajstán, que le valió para ganar 10 puntos y colocarse líder hasta que cambió la carrera. Ninguno de los intentos fue lo suficientemente sólido para romper el grupo, aunque buena parte de las selecciones sumase puntos en esos sprints.
Fue a falta de setenta y cinco vueltas cuando España se iba adelante y sólo le seguía Alemania, aunque poco después se sumaría Francia. Los tres de delante porfiaron pero sin poder pasar de la media vuelta, aunque ello les supuso ir subiendo en la general y a Francia, pasar a la primera posición, hasta que un último acelerón minó la resistencia del pelotón, para ganar vuelta una vez que se llevaron el penúltimo sprint. En ese momento estaba bastante claro que el oro sería para Francia, y que entre Alemania y España estarían las otras dos medallas, ya que parecía improbable que otra selección más sumase vuelta.
“Lo normal es una prueba de esta es ganar la vuelta en quince o veinte y a nosotros nos ha costado sesenta. Los alemanes iban bastante fastidiados y nos ha venido muy bien que llegase Francia”, valoraba el mallorquín. “Ha estado complicado, pero lo único que nos valía era ganar vuelta, ya que con ese estábamos en las medallas, por lo que hemos insistido hasta que por fin ha salido”, continuaba el menorquín.
El último sprint debería decidir las posiciones del podio, con ventaja germana, a la que le valía seguir la estela de los nuestros. Pero un potentísimo ataque de los baleares a falta de cuatro vueltas desbarató las aspiraciones germanas y daba una merecida plata a la pareja española.
“Estaba claro que teníamos que atacar y más viendo que los alemanes no iban muy sobrados. La pena es que no hubieran quedado un par de sprints más porque estoy seguro de que habríamos ganado el oro”, indicaba Muntaner. “Lo hemos preparado bien, y es que en nuestro caso, vamos a lo seguro”, añadía Torres.
De esta forma, Muntaner se acerca al sueño que nos comentaba en los pasados Nacionales, de ser campeón del mundo de esta disciplina con Torres. El primer paso está dado, siguiendo la tendencia que marcó Joan Llaneras, triple campeón del mundo en esta prueba, primero con Miquel Alzamora (1997) y luego por partida doble con Isaac Gálvez (2000 y 2006), lo mismo que Teruel lo ha hecho en la puntuación. Pero falta ese oro que algún día debe llegar.
Fuente RFEC.
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