David Muntaner y Albert Torres volvieron a demostrar que son la mejor pareja de americana del planeta, y en la noche de ayer, y tras una larga discusión de los jueces, añadieron un logro de altura a su palmarés. Tras la plata de Minsk 2013, anoche entraron en los anales en Cali (Colombia) al conseguir coronarse campeones del mundo de americana, superando en la República Checa y Suiza, haciendo valer la vuelta ganada tras una ofensiva de vértigo en los últimos giros.

Al inicio de la final, programada a 200 vueltas (50 kilómetros) y con diez esprints puntuable, España, o lo que es lo mismo, Muntaner y Torres se mostraron reservados, a la espera de acontecimientos. Australia (Edmonson y O’Shea) fueron los primeros en disparar, ganando vuelta, lo que les permitió ir por delante de la final de americana durante el primer tramo. David y Albert realizaban una labor de control, pero Bélgica comenzaba a sumar -sólo dejó de hacerlo en tres pasos- y en el segundo esprint ya mandaba, con permiso de la vuelta ganada por Australia. De Ketele y De Buyst comenzaban a realizar una labor de desgaste que les llevó a encadenar dos victorias parciales.

Alemania (Bommel y Reinhdart) buscó alianza con Rusia (Serov y Ershov) y España, que en el cuarto esprint sumaba cinco puntos que les metían en posiciones provisionales del podio (terceros). La carrera se rompía y una caída múltiple estuvo a punto de coger la rueda trasera de Muntaner. Bélgica volvía a tirar para amontonar más puntos y al ecuador de la carrera, España sumaba otros cinco puntos para ilusionar, más cuando todos viajaban en la misma vuelta.

Eso incrementó la tensión, a la par que De Ketele y De Buyst abrían una brecha de nueve puntos. Se vigilaban España y Bélgica al límite, pero a falta de 31 giros, llegó un ataque que cambió la historia. El menorquín Albert Torres puso la directa hacia las medallas, y junto a Muntaner halló en los suizos Kueng y Schir dos buenos aliados para intentar ganar vuelta, y arañar puntos. Y así lo hicieron, y pese a que los belgas celebraban efusivamente una victoria que parecían hacer suya, y los baleares Muntaner y Torres parecían dar por buena la plata, al final las reclamaciones y visionados de los vídeos acabaron por llevar a lo más alto al David Muntaner y Albert Torres, que con 18 puntos y vuelta ganada, por los 14 de la República Checa (Blaha y Hacecky), se coronaban campeones del mundo y vestían así el maillot arco iris, siguiendo los pasos de Joan Llaneras y Miquel Alzamora en Perth. El podio lo completaban los suizos Kueng y Schir, 8), pero David Muntaner y Albert Torres ya han entrado, por méritos propios, en la historia del ciclismo en pista mundial y ya son leyenda. Son de oro.